El Observatorio del Turismo Rural ha elaborado un informe con los principales rasgos de los turistas rurales de más de 66 años.
El estudio revela que se trata de un cliente frecuente, ya que el viajero sénior tiende a realizar estancias en alojamientos rurales con mayor asiduidad. Concretamente el 41,8% hacen una escapada al año, pero hasta un 39,8% entre dos y tres estancias al año. En ese sentido, seguramente influye el hecho de tratarse de un perfil de viajero que no depende de un calendario laboral (porque ya no trabaja), lo que además les convierte en posibles “desestacionalizadores” de la demanda, al poder permitirse pernoctar entre semana.
Entre el resto de características destacadas encontramos que la mayoría de los turistas séniors prefieren realizar sus escapadas rurales fuera de su comunidad autónoma (62%). Una cifra 26 puntos porcentuales mayor a la de hacer turismo rural dentro de su propia región (35,4%). Es posible que la disponibilidad de tiempo para hacer viajes más largos propicie esta situación, por lo que hemos querido profundizar en cuál es la comunidad de origen y destino habitual de este perfil de viajero.
Por un lado, encontramos que la mayoría de turistas rurales séniors residen en Cataluña (36,5%) y Madrid (21,4%), ciudades que en general son grandes emisoras de todo tipo de viajeros. Asimismo, Andalucía (12,06%) también destaca como una de las procedencias más habituales. Por otro lado, Cataluña (24,72%) y Andalucía Los turistas rurales séniors, un nicho de mercado (11,61%), también son, junto con Castilla y León (10,86%) y Asturias (10,11%) las comunidades preferidas por los séniors a la hora de hacer una escapada rural.
Por otro lado, el estudio revela que un 20,3% de los alojamientos rurales del país dicen apostar por el nicho de mercado vinculado al cliente sénior.
A nivel geográfico, esta apuesta se distribuiría de tal manera que Canarias Los turistas rurales séniors, un nicho de mercado A nivel geográfico, esta apuesta se distribuiría de tal manera que Canarias (33,3%), Andalucía (24,3%) y Galicia (23,9%) serían las comunidades con mayor especialización en el viajero de la tercera edad.
Este sector tiene mucho que ofrecer a esta clientela y su oferta debería hacerse cada vez más visible como una propuesta específica para un público objetivo que le brinda múltiples posibilidades. En cuanto al tipo de alojamiento rural que busca el viajero sénior, el Observatorio del Turismo Rural revela que prefieren el alquiler completo, con un 59,4% que así lo han señalado, en comparación del 40,6% que opta por alquilar habitaciones. Ello nos indica que, probablemente, viajen en familia o con grupos de amigos que estén en su misma situación, ya jubilados, o que busquen una mayor comodidad y autonomía en espacios totalmente independientes a otros huéspedes.
Precisamente, en relación a la familiaridad del cliente de la tercera edad con el uso de internet para organizar su escapada rural no es sorprendente que a la hora de realizar la reserva del alojamiento la mayoría prefieran hacerlo vía telefónica (41,6%), frente al 33,9% que la realiza por mail o al grupo minoritario que lo hace a través de la reserva online (24,4%). Además, el porcentaje se dispara cuando preguntamos si alguna vez han organizado una estancia de turismo rural desde un dispositivo móvil. El 72,6% han respondido que no, y tan sólo un 27,4% han contestado que en alguna ocasión sí que lo han organizado vía móvil o tablet.
Por otro lado, la conexión a internet pasa a un último plano entre los aspectos más importantes para el turista sénior, puesto que el 95,6% ha indicado no valorarlo. Sin embargo, hay otros aspectos que consideran en primer lugar y que destacan frente a otras franjas de edad. Al profundizar en estos datos encontramos que la limpieza (63,7%), el paisaje-entorno (58,7%) y la buena ubicación (43,1%) son los tres aspectos más importantes para ellos, que viajan motivados por la desconexión y por el contacto con la naturaleza. No obstante, lo que destaca en esta respuesta, es que además de estas prioridades el turista sénior busca la amabilidad del propietario (38,1% séniors vs. 24,7% media resto turistas) y el precio del alojamiento paso a un segundo plano (23,1% séniors vs. 45,6% media resto). Por todo ello, deducimos que el poder adquisitivo es mayor y la atención al cliente prioritaria, aspectos que habría que tener en cuenta en la elaboración de propuestas concretas orientadas a este colectivo para sus vacaciones rurales.